Varios estudios realizados en Europa y Estados Unidos demuestran que el horario de verano tiene muy poco efecto en el ahorro de energía.
El 31 de marzo se adelantará una hora el reloj en toda Europa, pero podría ser una de las últimas veces que ocurra. La convención del horario de verano podría suprimirse en la UE si prospera una petición de expertos.
Esperan que la cuestión se aborde en las elecciones al Parlamento Europeo que se celebran el 9 de junio. En 2018, el Parlamento votó a favor de eliminar los cambios de hora dos veces al año. Una encuesta realizada entre 4,6 millones de ciudadanos de la UE mostró un fuerte apoyo a su eliminación.
Los cambios debían entrar en vigor en 2021, pero se abandonaron justo antes de la pandemia de COVID-19. Ahora que resurge el debate, una de las principales cuestiones que aún no ha recibido una respuesta concluyente es si el horario de verano reduce realmente el consumo de energía.
Varios estudios han llegado a la conclusión de que el impacto del horario de verano en el medio ambiente es insignificante, o incluso negativo. Entonces, ¿ha llegado la hora de los cambios de reloj estacionales?
¿Por qué se introdujo el horario de verano en Europa?
En el Reino Unido y Alemania, el horario de verano se introdujo para conservar el carbón durante la Primera Guerra Mundial. Se suprimió cuando terminó la guerra, pero volvió a aplicarse en los años 80, cuando volvió a surgir la necesidad de ahorrar recursos, impulsada por la crisis mundial del petróleo.
Desde 2002, todos los países de la Unión Europea –excepto Islandia– deben ajustar sus relojes el último domingo de marzo y de octubre.
¿Reduce el horario de verano el consumo de energía?
Varios estudios realizados en Europa y Estados Unidos demuestran que el horario de verano tiene muy poco efecto en el ahorro de energía.
En Italia, la Sociedad Italiana de Medicina Ambiental calculó que incluso posponiendo el cambio de reloj de finales de octubre a finales de noviembre el país ahorraría 70 millones de euros en facturas de combustible.
Un estudio realizado por investigadores de la Universidad Carolina de Praga utilizó datos horarios de 2010 a 2017 para constatar que el horario de verano en Eslovaquia supuso un ahorro energético estimado equivalente a tan solo el 0,8% del consumo anual de electricidad. En Estados Unidos, un estudio realizado por el Departamento de Transporte en 1975 demostró que el horario de verano reducía en torno al 1% el consumo energético del país.
Este ahorro insignificante puede deberse, en parte, a que muchos estadounidenses se levantan de la cama antes de las 7 de la mañana. Gran parte de la energía ahorrada por no tener las luces encendidas por la noche se compensaba con tenerlas encendidas por la mañana.
Una publicación de 1993 sobre el consumo de combustible (gas, carbón) en Francia y Bélgica observó un aumento del consumo de combustible con el horario de verano. Los estudios sobre la dispersión de contaminantes corroboraron este dato. En cambio, los husos horarios naturales lo más cercanos posible a la hora solar probablemente alineen mejor las curvas diarias de luz y temperatura con nuestros horarios.
Esto podría suponer un ahorro de energía en iluminación industrial y de otro tipo a primera hora de la mañana, calefacción a primera hora de la mañana durante los meses más fríos, ya que la gente sale a trabajar una hora más tarde, y menos necesidad de aire acondicionado en el coche durante el trayecto después del trabajo y por la noche en casa.
¿Dejará Europa de cambiar sus relojes?
El año pasado, los expertos pidieron al Consejo de la Unión Europea que incluyera en su orden del día el tema de la supresión de los cambios de hora. Dado que la propuesta de poner fin al cambio de hora aún no se ha aplicado, los partidarios de la abolición esperan que el tema se aborde ahora en las elecciones al Parlamento Europeo de junio.
La Iniciativa sobre el Uso del Tiempo ha lanzado un Manifiesto de la UE sobre Políticas del Tiempo que incluye doce cambios necesarios que Europa debe realizar para garantizar el «derecho al tiempo» a todos los europeos.
«La UE debe reaccionar ante el impacto negativo de los relojes desalineados presionando para implantar en Europa husos horarios permanentes lo más cercanos posible a la hora solar (hora natural)», reza el manifiesto.
«Los relojes desajustados que hacen que los horarios empiecen antes que el ciclo natural día-noche aumentan la falta de sueño y causan efectos negativos en la salud humana, la economía y la seguridad. La UE tiene el poder de cambiar esto», concluye.
Fuente: Euronews. Rebecca Ann Hughes. Texto original en inglés. https://es.euronews.com/green/2024/03/29/ahorran-energia-los-cambios-de-reloj-los-expertos-dicen-que-la-diferencia-es-insignificant