AENOR ha comenzado el desarrollo de un tipo de auditoría orientada a complementar a las distintas certificaciones vigentes en el campo del Bienestar Animal tras las denuncias sobre las practicas realizadas en una granja de Burgos que contaba con el sello. El programa tendrá como características principales la voluntariedad, evaluaciones sorpresa y niveles de cumplimiento.
En un comunicado, AENOR valora y agradece las informaciones que han revelado el maltrato atroz en una explotación de porcino, «que rechazamos desde lo más profundo. Es una situación que nos duele especialmente, como entidad que viene dedicando un notable esfuerzo al impulso de buenas prácticas en bienestar animal».
Desde el momento en que AENOR tuvo conocimiento de las imágenes, se planteó en qué forma podía actuar -desde sus capacidades- para contribuir a evitar que esas situaciones volviesen a tener lugar, continúa la nota. «Al día siguiente de conocer las instalaciones a las que se atribuyen las imágenes, realizó una auditoría no anunciada junto al propietario del Protocolo de certificación de Bienestar Animal Welfair». Como resultado, siguiendo las indicaciones del propietario del Protocolo, se retiró ese mismo día el certificado de Bienestar Animal a las dos instalaciones de Domingo del Pozo Martínez y Otro, S.C. en Quintanilla del Coco (Burgos). Uno de los peores casos de maltrato animal en España
Aenor aclara que durante la rigurosa auditoría, no se apreciaron situaciones del nivel de gravedad que se reflejan en las imágenes. Sí se observaron instalaciones coincidentes con las que aparecen en las imágenes y la retirada de la certificación se fundamentó en incumplimientos graves del Protocolo Welfair, como animales que permanecen en las jaulas de gestación control más tiempo del establecido o densidades superiores a las permitidas. Descárguese aquí gratis el último número de elEconomistaAgro
AENOR y el conjunto de las entidades certificadoras en Bienestar Animal, desarrollan sus auditorías siguiendo las condiciones establecidas por los propietarios de los Protocolos. AENOR lo hace desde 2014, habiendo sido pioneros en ellas desde la convicción de que están teniendo un papel esencial tanto en un entendimiento común de lo que son buenas prácticas en bienestar animal, como en su extensión a una escala de la que pueden estar legítimamente orgullosos los sectores ganaderos españoles.
Sin embargo, «existen casos puntuales» en los que no se respeta el compromiso de mantenimiento de las condiciones de los protocolos en Bienestar Animal en todo momento e incluso se incurre en la mala fe para superar las auditorías.
La revisión de las auditorías realizadas entre 2019 y 2023 a la instalación a la que ha sido retirado el certificado, da como conclusión que éstas se realizaron de forma correcta de acuerdo al Reglamento Welfair. Se detectaron distintos incumplimientos que dieron lugar a las acciones establecidas, que incluso llegó a la retirada del certificado en 2022. En ningún caso se constataron situaciones similares a las que se reflejan en el vídeo anteriormente mencionado.
Refuerzo en Bienestar Animal
Con el objeto de minimizar al máximo la posibilidad de esas malas prácticas puntuales y, sobre todo, de reforzar el respaldo a la inmensa mayoría de los ganaderos, que están comprometidos con el Bienestar Animal; AENOR comienza el desarrollo de un programa que complementará a las certificaciones vigentes en este campo.
Sus bases serán el carácter voluntario y tendrán evaluaciones no anunciadas complementarias a los seguimientos establecidos en los Protocolos de certificación en las que se evaluarán prerrequisitos concretos identificados por AENOR, que podrán ser legales o requerimientos específicos especialmente sensibles, de entre los desarrollados por los propietarios de los protocolos.
Habrá tres niveles de cumplimiento, coherentes con los criterios de evaluación de los reglamentos de los propietarios de los protocolos.
Se realizará una emisión de declaraciones del resultado, desvinculados de los certificados de conformidad y que den información sobre la naturaleza de las evaluaciones no anunciadas y del resultado obtenido.
Por último, AENOR aclara que los incumplimientos de las condiciones de la verificación, detectados en evaluaciones tanto programadas como en no anunciadas, iniciarán de inmediato las medidas para gestionar la sanción correspondiente, como la retirada.
AENOR abre ahora un período de consultas con distintas partes interesadas en la certificación de Bienestar Animal, especialmente con las entidades propietarias de los esquemas de certificación. Sus resultados serán tenidos en cuenta para la conformación final del Programa, de la que AENOR informará públicamente; esperando su entrada en vigor durante 2024.
Fuente: eleconomista.es